El Comité de Organización de Emergencia de Salud (COES) reconoce a la salud mental como una dimensión fundamental de las estrategias sanitarias en esta situación de crisis. En tal sentido, se elaboró una guía de prácticas destinada a equipos que brindan servicios en hospitales y centros de salud.

El Ministerio Salud, a través de la Dirección General de Salud Mental, promueve una guía de buenas prácticas para el abordaje de situaciones relacionadas a la salud mental en el periodo de aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia de coronavirus Covid-19. Durante la fase de contención, resulta necesario trazar líneas de acción que se consideran centrales para la red provincial como parte integrante del proceso salud-enfermedad-cuidado de la población.

Estas recomendaciones fueron elaboradas por el Comité de Organización de Emergencia de Salud (COES) y están destinadas a todos los equipos que brindan servicios relacionados en centros de atención primaria, como así también hospitales especializados y generales.

En la oportunidad, el director general de Salud Mental de la provincia, Carlos Berbara, comentó que a partir del inicio de esta emergencia, desde la cartera sanitaria se incorporó la dimensión de la salud mental como componente fundamental de este proceso, entendiendo que las conductas de cuidados que asuma la comunidad resultan la mejor estrategia para hacer frente a la pandemia.

Cómo cuidar la salud mental durante el aislamiento

Frente a este interrogante, y pensado en la comunidad en general, el funcionario señaló que el primer punto a tener en cuenta es que esta situación es transitoria. En esta línea, Berbara explicó: “Las reacciones psíquicas de ansiedad, angustia y temor son lógicas y esperables. Se trata de estrategias adaptativas propias del ser humano en un contexto cambiante”.

En tal sentido, mencionó que hay que evitar calmar la ansiedad con tabaco, alcohol u otras drogas, ya que a corto y largo plazo empeoran el bienestar mental y físico al ser inmunosupresoras y promover conductas adictivas. A su vez, el director de Salud Mental destacó que es importante que la gente entienda que la medida de cuarentena no es una disposición personal pasiva, sino una actitud proactiva de afrontamiento ante una situación epidemiológica que lo exige.

En otra línea, Berbara sugirió evitar sobreexigencias que pueden generar mayor estrés. En tal sentido, argumentó: “Muchas veces son impuestas por los medios que apuntan solamente a la vida como un sistema de productividad. Permitirse el aburrimiento es algo que, en general, no se viene habilitando, y es muy importante que lo hagamos tanto con los adultos como con los más chicos”.

No obstante resaltó que es necesario sostener ciertas rutinas, tales como: diferenciar días hábiles de fines de semana; horarios de trabajo y descanso; destinar tiempo y espacio para la actividad física (las hormonas del estrés se metabolizan con la actividad física); y garantizar el reposo y la alimentación adecuada.

Por último, el funcionario recomendó habilitar espacios de diálogo al interior de cada familia para conocer cómo vive cada integrante lo que sucede en la actualidad, como así también la importancia de informarse a través de fuentes oficiales y evitar cadenas de redes sociales.

Atención remota en Salud Mental

Como estrategia sanitaria en este proceso de aislamiento y con el objetivo de garantizar la continuidad de los tratamientos y habilitar un espacio de contención y de escucha para la comunidad en general, desde Ministerio de Salud se generó una red de atención remota en salud mental.

Esta línea de acción está compuesta por más de 20 nodos distribuidos en distintas localidades de la provincia, en la que diversos equipos buscan garantizar el cuidado de la salud mental de la comunidad. Los centros de atención pueden consultarse a través de la página de facebook Dirección de Salud Mental – Entre Ríos o ingresando al siguiente link: https://www.facebook.com/DirecciondeSaludMentalEntreRios/

Además, para este sistema asistencial remoto se cuenta con la colaboración del Colegio de Psicólogos de Entre Ríos que acompaña el trabajo con más de 150 voluntarios que están a disposición.