El Ministerio de Salud emitió una serie de recomendaciones para evitar contraer el síndrome urémico hemolítico, una enfermedad que afecta principalmente los riñones. La misma es más común en niños y niñas entre 1 y 5 años, adultos mayores y personas con patologías preexistentes.

En virtud de la posibilidad de contraer el síndrome urémico hemolítico, el Ministerio de Salud de Entre Ríos, brindó detalles de la enfermedad y emitió una serie de recomendaciones para tomar conciencia y llevar a cabo acciones de cuidado.

En esta línea, es importante mencionar que dicha patología afecta, en su mayoría, a niños y niñas entre 1 y 5 años, a adultos mayores y personas que padecen enfermedades que afectan su sistema inmunológico.

Sobre el contagio, la nefróloga del hospital Materno Infantil San Roque, Anabella Colazzo, mencionó el mismo se puede dar por consumir agua o alimentos contaminados y mal cocidos, también de persona a persona por la falta de higiene en las manos, o contacto directo con animales u objetos infectados.

En lo que respecta a la sintomatología, lo común es que se presente un cuadro de diarrea intensa con estrías de sangre, dolor abdominal y vómitos. Luego de unos días puede aparecer palidez, decaimiento e inapetencia. Asimismo, como daña los pequeños vasos de todo el organismo se pueden presentar alteraciones neurológicas, cardiológicas, hepáticas y pancreáticas.

El 90 por ciento de los casos son producidos por la bacteria llamada Escherichia coli, que se encuentra frecuentemente en la materia fecal de animales vacunos sanos (terneros y vacas), también puede encontrarse en la de ovejas, cabras y ciervos. Los cerdos, aves, perros y gatos pueden excretarla, pero es menos frecuente.

Finalmente, la especialista afirmó que para prevenirla se aconseja:
– Asegurar la correcta cocción de la carne; la bacteria se destruye a los 70 °C. Esto se consigue cuando la carne tiene una cocción homogénea.
-No dar carne picada a los niños menores de cinco años.
-Evitar el contacto de las carnes crudas con otros alimentos.
-Consumir leche y derivados lácteos correctamente pasteurizados.
-Conservar la cadena de frío.
– Lavar verduras y frutas con agua segura.
-Asegurar la correcta higiene de las manos lavándose con agua y jabón antes de preparar los alimentos.
-No bañarse en aguas contaminadas o prohibidas.
-Higienizarse adecuadamente con agua y jabón luego de tener contacto con animales domésticos y principalmente con los de granja.
-No utilizar los mismos utensilios (cuchillo, tenedor, tabla) para manipular carne cruda y verduras u otros alimentos que no requieren cocción posterior.
-Almacenar la carne en los estantes inferiores de la heladera dentro de recipientes que impidan el goteo hacia otros alimentos ubicados en estantes inferiores.