Se realizará en Paraná el 31 de marzo, 1 y 2 de abril la quinta jornada

El ministro de Salud, Hugo Cettour, se reunió con la presidente de la Liga Entrerriana de Ayuda al Diabético (Leadi), Silvina Vismara, y demás integrantes de la entidad, a quienes entregó material de difusión como aporte de la cartera sanitaria provincial al desarrollo del 5º Encuentro Nacional de Jóvenes con Diabetes, durante los días 31 de marzo, 1 y 2 de abril en la Escuela Hogar Eva Perón de la capital entrerriana.

La diabetes es una enfermedad incurable que, a tiempo, puede ser tratada, afirman los especialistas de la salud y las personas que padeciéndola aprenden día a día a convivir con ella. En la capital entrerriana, los días 31 de marzo, 1 y 2 de abril, se realizará en la Escuela Hogar Eva Perón el 5º Encuentro Nacional de Jóvenes con Diabetes organizado por la Federación Argentina de Diabetes (FAD) y la Liga Entrerriana de Ayuda al Diabético (Leadi) con el apoyo del Ministerio de Salud de Entre Ríos.

Silvina Vismara, presidente de Leadi, valoró el aporte del ministro de Salud, Hugo Cettour,  apoyando la propuesta de educación alimentaria para jóvenes con diabetes, en pos de mejorar la calidad de vida de quienes padecen esta enfermedad y sus familias.

Del encuentro que se realizará por primera vez en Paraná, participará un centenar de jóvenes de Entre Ríos, Mar del Plata, Bahía Blanca, Córdoba, Formosa, Corrientes, Chaco, Santa Fe, Viedma y también de Colombia y Perú. Cada participante se acreditó previamente, enviando un formulario y certificado médico, explicitando qué medicamento utiliza y qué cantidad de insulina se aplica.

Los integrantes de la organización no gubernamental destacaron la importancia del trabajo en red, entre los organismos que integran la Federación Argentina de Diabetes (FAD) y los servicios de Endocrinología, Diabetes y Nutrición de los hospitales San Martín y San Roque y el ministerio de Salud, para la educación alimentaria en el tratamiento de la diabetes.

El objetivo del encuentro es que los jóvenes ganen “independencia y responsabilidad respecto a su enfermedad”. Durante los tres días los jóvenes asistirán a talleres de cocina y alimentación saludable, a charlas sobre diabetes y sexualidad; diabetes y embarazo; actividad física; cómo reaccionar ante una emergencia; la discriminación; la legislación vigente; y la vinculación de esta enfermedad con otras como la celiaquía y los trastornos alimentarios. Además, un equipo de psicólogas abordará un problema familiar frecuente: qué pasa con el hermano o los hermanos de un chico diabético.

Los organizadores destacaron el gran apoyo del gobierno entrerriano en el desarrollo de las jornadas.

La importancia de la detección temprana

Desde el Programa Provincial de Prevención de la Diabetes la directora, Silvia Garbe, destacó que el eje del trabajo está en la prevención primaria, secundaria y terciaria. «Trabajamos sobre los grupos de riesgo y capacitamos a los equipos de salud para que puedan detectarlos». En ese sentido, destacó que el 90 por ciento de la población padece de diabetes tipo 2, enfermedad que se puede prevenir. La diabetes tipo 1 es la que no se puede prevenir y afecta al 2 por ciento de la población, implicando que las personas que la padecen requieran un tratamiento con aplicación de insulina y control de glucemia. «La diabetes tipo 1 es la menos frecuente, la que más gastos implica y no tiene prevención. Trabajamos la prevención para la diabetes tipo 2 que tiene que ver con evaluar el antecedente familiar de diabetes,  el factor genético, la obesidad, el sedentarismo, la dieta rica en grasas e hidratos de carbono. Si una persona tiene antecedentes familiares de diabetes trabajamos para hacerla bajar de peso y cambiar los hábitos», destacó Garbe.

En ese sentido, la funcionaria remarcó que «la diabetes es una epidemia y cada vez hay más diabéticos en la población». Desde la prevención secundaria, el programa trabaja con los pacientes diabéticos ya diagnosticados para que la enfermedad no se complique causando «ceguera, amputaciones de miembros inferiores, enfermedad renal, infartos y el coma diabético». El Ministerio de Salud trabaja en la prevención con los programas Entre Ríos Saludable y Entre Ríos Camina, además de un equipo de nutricionistas y profesores de educación física que enseñan la importancia del autocuidado para adquirir pautas saludables de alimentación y actividad física.

La labor de Leadi

Leadi, en su sede de 9 de julio 20, cuenta con un equipo de enfermería que atiende de lunes a viernes de 8.30 a 12 y de 17 a 20 para realizar controles del nivel de glucemia. El diabético que adquiere una buena educación alimentaria puede acceder a una mejor calidad de vida. El sedentarismo y la mala alimentación predisponen a las personas a ser diabéticas. Si la enfermedad no se trata, la persona vive mal y puede adquirir una discapacidad (ceguera, amputaciones de extremidades). En la sede de Leadi se darán talleres de alimentación saludable, gratuitos.

“Hay que adaptarse a la diabetes”

Cristian G. tiene 36 años y en julio de 2010 los médicos le detectaron Diabetes Tipo 2. Este joven técnico electrónico, policía y padre de 2 hijos, comparte la experiencia de ser diabético. “Estaba muy desganado en el trabajo y en mi casa, sentía una sed intensa y, por las noches me levantaba a orinar frecuentemente. Sólo el afeitarme me provocaba pequeñas infecciones que tardaban una semana en cicatrizar. Decidí que era el momento de ir al médico y practicarme unos análisis de control. Recibí el llamado del laboratorio porque detectaron que mi sangre era muy espesa y me solicitaron repetir el estudio. Ahí me revelaron altísimos valores: 340 de glucemia en sangre, 300 de glucemia en orina 300, 2 mil triglicéridos. El endocrinólogo, en la consulta y con los análisis sobre el escritorio, me inyectó insulina PH y me dijo: “Estás mal, no sé cómo no te dio una pancreatitis”. Yo tenía antecedentes de diabéticos, por mi padre, pero no era insulinodependiente.

Desde ese día me aplico insulina y tomo Metformina. Iosper me da los remedios sino no sé lo que haría.

Este año ha sido complicado. Recién me acostumbro a mi enfermedad y disminuí el ritmo de vida. Muchas veces me siento mal y bajo mi rendimiento en el trabajo, lo que me afecta y mucho. Lo esencial para el control de la diabetes es la alimentación y me cuesta encontrar un equilibrio entre los horarios laborales y personales. Pero estoy aprendiendo. Me acerqué a la Liga Entrerriana de Ayuda al Diabético (Leadi) y fui al congreso anual que se desarrolló en agosto del año pasado en Villa Giardino, Córdoba. Trato de aconsejar a otros sobre cómo actuar cuando los valores de la glucemia disminuyen y controlo mucho más a mi hijo que está propenso a la enfermedad.

Hay que adaptarse a la diabetes, es una enfermedad frecuente. En Leadi –en 9 de Julio 20 de Paraná– nos ayudan, nos dan charlas de cocina saludable, y nos enseñan a saber más de la diabetes. Lo importante es que las personas estén informadas respecto a la diabetes y no descarten los síntomas. A la diabetes hay que respetarla y saberla llevar. Los controles médicos son importantísimos y necesarios y hay que prestar atención a los hijos, más si tienen problemas de sobrepeso».