Condiciones de vida
Aglomerados urbanos Concordia y Gran Paraná. Hogares y Población bajo la Línea de Pobreza (LP) y bajo la Línea de Indigencia (LI). 2º semestre de 2022. (Último dato)
Aglomerado urbano | Pobreza | Indigencia | |||
Hogares (%) | Personas (%) | Hogares (%) | Personas (%) | ||
Concordia | 44,4 | 55,2 | 8,1 | 11,1 | |
Gran Paraná | 27,7 | 38,2 | 4,6 | 6,5 | |
Fuente: | |||||
INDEC, Encuesta Permanente de Hogares. |
Notas metodológicas.
Consideraciones sobre el relevamiento del segundo trimestre de 2020. (1) El relevamiento de campo de la EPH, durante el segundo trimestre de 2020, se realizó en el contexto del decreto n° 297/2020, que establece el aislamiento social, preventivo y obligatorio debido a la pandemia de la COVID-19. Con el objetivo de no interrumpir el operativo continuo y seguir brindando gran parte de la información habitual, se siguieron las recomendaciones internacionales aplicadas por todos los países de la región, que consisten en pasar de una modalidad presencial a la modalidad telefónica para contactar y realizar la entrevista a los hogares. En el caso de la EPH, se respetó el esquema muestral original, es decir, se continuó con la misma rotación de la muestra y se estableció el siguiente procedimiento de relevamiento: • En el caso de las viviendas con teléfono conocido, se contactó al hogar y se realizó la entrevista por teléfono. • En las viviendas de las que no se contaba con un teléfono, ya sea porque participaban por primera vez en la encuesta o porque en sus participaciones anteriores no se pudo obtener, los encuestadores buscaron los teléfonos por diversos mecanismos: – Se realizaron búsquedas a través de distintos mecanismos (guías telefónicas, buscadores online, etc.) para obtener el número de teléfono de las viviendas a partir de la dirección. – En aquellas jurisdicciones en las cuales durante el semestre se flexibilizaron las condiciones de aislamiento, a partir de autorización explícita de la autoridad competente, se salió a campo exclusivamente para hacer contacto con las viviendas de las que no se contaban con teléfonos, para recolectarlos y luego realizar la encuesta vía telefónica; o para la recuperación (total o parcial) en los casos en los que no se pudo obtener la entrevista telefónica. La decisión de no realizar las entrevistas presenciales tuvo un doble propósito. Por un lado, preservar la homogeneidad metodológica y operativa de todo el período y minimizar las distorsiones que puedan derivarse de la coexistencia de dos estrategias de relevamiento. Por otro lado, y no menos importante, mantener el distanciamiento social para evitar la exposición al contagio y proteger la salud de las personas entrevistadas y quienes encuestaron. Es importante advertir que el cambio en el modo de recolección de la información en las encuestas pueden traer consigo sesgos en las estimaciones, principalmente relacionados con dos fenómenos: el aumento en los niveles de no respuesta debido a las dificultades para obtener el teléfono; y motivos asociados con el cambio de modalidad. Con el objetivo de morigerar el sesgo, de acuerdo con las recomendaciones de la Dirección de Metodología Estadística del INDEC y de la División de Estadísticas de la CEPAL (que, recogiendo las recomendaciones internacionales, asesoró a todos los países de la región en este contexto de pandemia por la COVID-19), al procedimiento de estimación habitual en este trimestre se le aplicaron tres ajustes adicionales. • Debido al cambio de modalidad en el relevamiento de la encuesta, en algunos aglomerados fue insuficiente la cobertura del panel que entraba por primera vez, el cual constituye alrededor del 25% de la muestra dentro de cada aglomerado. De esta manera, se realizó una corrección sobre ese grupo de rotación para los aglomerados más afectados, y se expandió el resto de la muestra relevada telefónicamente, ya que en las participaciones anteriores fue posible relevar la información que permitió el acceso al hogar de forma directa. • En segundo lugar, una vez obtenido el factor de expansión de diseño, se le aplicó un ajuste a través del método de propensity score, que consiste en estimar en un modelo la probabilidad o propensión que cada hogar tiene al responder la encuesta, a partir de una serie de variables independientes de acuerdo a la información obtenida en los cuestionarios de aquellos hogares relevados en un período anterior. Contar con un conjunto de covariables relevadas en paneles anteriores permitió estimar un patrón de ausencia de respuesta para los hogares que efectivamente respondieron la encuesta telefónica. • Finalmente, a la hora de realizar el ajuste final por calibración a las proyecciones poblacionales de cada aglomerado se tuvieron en cuenta los totales por sexo y edad. (2) El primer semestre de 2020 está conformado por los trimestres 1° y 2° del año. (3) Es importante destacar que hasta que no se realicen estudios que permitan descartar o medir los sesgos producidos por los cambios en la operativa de la encuesta, las estimaciones no son estrictamente comparables con las estimaciones de semestres anteriores. Con relación a la medición de la pobreza, es necesario tener presente que la información que se difunde está producida con la metodología de cálculo de la pobreza que se ha estado utilizando desde 1992, es decir, con una valorización de la canasta básica alimentaria (CBA) y de la canasta básica total (CBT) comparada con los ingresos de los hogares relevados por la EPH1. Desde 2016, la medición introdujo la actualización de la línea de indigencia y de pobreza con base en la composición de la CBA resultante de la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo) 1996/97. Dicha composición fue validada, en términos de la estructura alimentaria, con el patrón de consumo que surge de la ENGHo 2004/05. La relación entre la CBA y la CBT se deriva, a su vez, de esta última (2004/05).
En esta Sección se presenta información de fuentes censales (años 2001 y 2010): datos e indicadores a nivel geográfico departamental. Se incluyen las últimas cifras relevadas por la Encuesta Permanente de Hogares que permiten medir, junto a otras fuentes definidas por el INDEC, la Línea de Pobreza y la Línea de Indigencia en los aglomerados urbanos del país que en nuestra provincia incluyen el Gran Paraná y Concordia.